Como agua para chocolate de Laura Esquivel

 

Como agua para chocolate es una novela romántica escrita por la mexicana Laura Esquivel y publicada en 1989. La novela cuenta la historia de Tita y su relación con su familia, así como sus relaciones románticas, todo con la cocina mexicana como coprotagonista.

La novela entra en el género del realismo mágico, ya que combina lo mundano y lo sobrenatural. Se trata de una obra mítica de la literatura y forma parte de la lista de las 100 mejores novelas en español del siglo XX.

Resumen de Como agua para chocolate

Primera parte

La novela nos sitúa en México a comienzos del siglo XX, en el rancho de la familia De La Garza. Todos los capítulos comienzan con una receta propia de la cocina mexicana. Asistimos al nacimiento de Tita, la última de las hermanas De La Garza, que tiene lugar en la cocina, por lo que la conexión entre la muchacha y la comida estaba predestinada. De hecho, Nacha, la cocinera de la familia, será la encargada de criar a Tita.

A los quince años Tita se enamora de Pedro, que le pide su mano en matrimonio, pero su madre se niega a esta unión pues cree que Tita debe quedarse cuidando de ella hasta que se muera. Le ofrece a Pedro la mano de su hija mayor, Rosaura, y éste acepta para poder quedarse cerca de Tita.

El día de la boda, Tita es la principal cocinera del evento, pero su tristeza es tal que sus lágrimas caen en el pastel de bodas. Cuando los comensales prueban la tarda les invade una profunda tristeza, que huyen de la boda entre náuseas y lágrimas. La única que sale ilesa de esta aparente intoxicación es Tita, que corre a consolarse en los brazos de Nacha, pero la encuentra muerta de melancolía abrazada a la foto de su antiguo novio.

Segunda parte

Tras la muerte de Nacha, Tita se convierte en la cocinera oficial del rancho. Pedro le envía flores como regalo y cuando su madre ve esto, la obliga a tirarlas, pero Tita las utiliza para cocinar unas codornices. Gertrudis se las come y es poseída por un calor afrodisíacos que la hace huir desnuda con un soldado revolucionario.

El matrimonio de Rosaura y Pedro es infeliz, ya que es evidente que el muchacho está enamorado de Tita. Todo se complica con la llegada de su primer hijo, Roberto, adoración de su tía Tita. De hecho, Rosaura es incapaz de darle el pecho a su hijo y esta responsabilidad recae en la protagonista, que lo hace a escondidas y con la complicidad de Pedro. Por su parte, la madre sospecha que Tita y Pedro tienen un amorío a escondidas y obliga a su hija Rosaura a mudarse con su familia.

Semanas después, una triste noticia asola a la familia: Roberto murió por un rechazo alimenticio. Tita culpa a Rosaura y su madre la golpea hasta hacerla sangrar. Tita huye a encerrarse al palomar del rancho y al día siguiente llega un doctor, John Brown, para llevarse a Tita a un manicomio por petición de su madre. Si embargo, finalmente el doctor no acata las órdenes de la madre de Tita y la lleva a su casa, donde la cuida con esmero.

Eventualmente, John Brown se enamora de Tita y le pide su mano en matrimonio. Tita, que había jurado no regresar jamás al rancho, se ve obligada a aceptar porque unos bandidos atacan a su madre y la dejan parapléjica. La madre está convencida de que Tita quiere envenenarla y desconfía de ella, y al final muere por un consumo excesivo de bebidas para no vomitar.

Tercera parte

Rosauro y Pedro tienen una segunda hija, Esperanza, que llena de alegría al a familia. Sin embargo, su madre, antes de morir, la aseguró un futuro funesto: al igual que Tita, Esperanza debería mantenerse soltera para cuidar de su madre hasta el día de su muerte. Cuando Tita se entera de esto, se enfurece al ver que esta horrible tradición parecía no tener fin.

Sin embargo, cuando Rosaura muere, también lo hace esta maldición. Tita y Pedro por fin pueden reanudar su romance sin obstáculos a la vista, aunque Tita duda sobre si debería aceptar la proposición de John Brown o aceptar la pasión ilícita de su relación con Pedro.

La novela concluye con la boda entre Esperanza y Alex, el hijo de John Brown. Tita y Pedro por fin pueden consumar su amor, pero la intensidad es tal que Pedro muere en el acto. Desolada, Tita decide reencontrarse con el alma de su amado reconstruyendo el fuego entre ambos comiendo cerillas y recordando sus momentos de pasión. De ambos cuerpos comienzan a salir chispas que incendian todo el rancho y sepulta en cenizas toda la propiedad. De este incendio sólo sobrevive el libro de recetas de Tita.

Personajes de Como agua para chocolate

Personajes principales

Tita: Josefita, apodada Tita, es la protagonista de la historia. Tuvo que cuidar de su madre y fue criada por Nacha, cocinera de la familia, quien le enseñó la verdadera esencia del amor por medio de la comida.

Pedro Musquis: Pedro es el amor de Tita, pero cuando supo que no se podía casar con ella lo hizo con su hermana mayor, Rosaura, con el pretexto de que era la única forma de estar cerca de Tita. Sin embargo, se sume en un matrimonio infeliz ya que está demasiado enamorado de Tita.

Mamá Elena: madre de Tita y sus hermanas, Gertrudis y Rosaura. Enviudó cuando Tita era muy pequeña y ésta quedó al cuidado de Nacha, la cocinara. Es una mujer autoritaria y no acepta la relación entre Tita y Pedro, insistiendo en que el deber de Tita es cuidar de ella hasta que muera.

Personajes secundarios

Rosaura: hermana mayor de Tita, se casó por Pedro obligada por su madre. Sin embargo, este matrimonio es infeliz ya que es evidente que su marido está enamorado de su hermana.

Gertrudis: hermana de Tita y engendrada de forma ilícita. Es una muchacha alegre y creativa que heredó de su padre el amor por el baile y la música.

Nacha: cocinera de la familia y mujer que crio a Tita. Le enseñó a ésta todo sobre el arte culinario. También fue víctima de un amor frustrado y no volvió a enamorarse de ningún hombre. Muere de melancolía después de la boda de Pedro y Rosaura al recordar a su gran amor.

Opinión de Como agua para chocolate

Como agua para el chocolate es una novela que trata sobre los amores imposibles, las tradiciones familiares, la revolución y la gastronomía. Otros ingredientes de esta obra cumbre de la literatura mexicana son la realidad y la ficción, y cómo éstas se entremezclan para crear una novela realmente única que, como el libro de recetas de Tita, ha conseguido pasar de generación en generación.